Catalogada por la UNESCO como una de las reservas de la biósfera, y a escasos kilómetros de la ciudad de Kazán, se encuentra la Reserva Natural de Volga-Kama. En su interior está el bosque más antiguo de Europa y un lago en el que viven las únicas ranas del mundo que dejaron de croar por mandato divino. En el siguiente reportaje especial conoceremos también la singular historia de un monasterio que funcionó como correccional de menores y que hoy vuelve a congregar a los fieles en torno a la tradicional fiesta ortodoxa de la Epifanía.