Durante un vuelo rutinario de Memphis (Tennesse) a San José (California), la tripulación del vuelo 705 de Federal Express no imagina que en breves instantes estará luchando para salvar la vida. El agresor, un empleado de la compañia que viaja a bordo, inicia un violento ataque contra los pilotos con la intención de hacerse con el control del avión, y estrellar seguidamente el aparato.