Durante los años 1942 y 1943, los submarinos alemanes incorporan unos aparatos de detección radioeléctricos denominados “Metox”. Sin embargo, pronto se hace evidente que tales aparatos radian energía, lo cual hacía posible su detección por parte de los aviones británicos.
El programa de construcciones establecido al comienzo de la guerra estaba teniendo una realización tan completa que cada día se incorporaba un nuevo submarino a la flota. Los éxitos crecen mes a mes a pesar de los progresos de la defensa británica…En este documental veremos que durante la Segunda Guerra Mundial, los submarinos alemanes trataron de cortar los suministros que llegaban a Gran Bretaña desde Estados Unidos.
Si hubiesen tenido éxito, los aliados habrían perdido la guerra casi con toda seguridad. Liderados por el almirante Karl Doenitz, grupos de submarinos alemanes surcaban los mares buscando su presa y casi hicieron rendirse a Gran Bretaña al privarle de suministros. El documental narra los secretos de las máquinas más letales de la Segunda Guerra Mundial: los lobos de mar de Hitler.