Toscamente modeladas y cocidas con prisa, como si, por alguna razón desconocida, los artesanos hubieran sentido la urgencia de dejar ese testimonio para generaciones futuras, las misteriosas figuras de Acámbaro representan la más fantástica fauna que pueda imaginarse. Es posible que sean el fruto de un delirio inducido por el peyote, aunque quizás se trate del recuerdo transmitido de padres a hijos de criaturas, hoy desaparecidas, que en otro tiempo convivieron con el hombre en aquella parte de México. Pese a su extraordinario interés, el tema figuraba en apenas media docena de libros y siempre con las mismas fotografías. La razón era simple: trastornado su cerebro tras un accidente, su descubridor y, después obsesionado coleccionista, decidió enterrar las figuras de Acámbaro en el olvido y no compartir con nadie su secreto.
Durante cuarenta años, nadie volvió a saber de ellas, hasta que “En Busca del Misterio” dio con su paradero. Hoy existe un museo en esa ciudad donde se exhiben parte de esas treinta y cinco mil figuras, pero fue gracias a este documental. Ahora, el espectador puede asistir a ese momento histórico en el que, tras décadas de oscuridad, los bizarros monstruos de barro, remedo de los que poblaron la tierra hace millones de años, vieron de nuevo la luz.
https://www.youtube.com/watch?v=K097TVeYPI0
Duración: 30:09