La noche del 8 de febrero de 2013, decenas de hinchas del club O’Higgins de Rancagua disfrutaron con un nuevo triunfo obtenido por su equipo en Talcahuano.
Para celebrar la victoria, un microbús con 37 pasajeros decidió desviarse de la ruta de regreso a casa, para compartir algunas horas en playas tomecinas. En la última curva de la cuesta caracoles antes de ingresar a Tomé, el microbús desbarranca causando la muerte de 16 personas y más de 20 heridos, en su mayoría menores de edad.
Un hecho que conmocionó a un país entero. El lado más humano de la tragedia y el relato de cómo llevar la vida después de la muerte unificados en una sola historia.