El equipo se dirige a un lugar apenas antes filmado: las misteriosas cuevas bajo la meseta de Guiza. Zahi está decidido a refutar las teorías de los conocidos como piramidiotas, que creen en la existencia de cámaras secretas subterráneas que conducen a la Esfinge. ¡Nadie podía imaginar que estas cuevas fueran el hogar de miles y miles de murciélagos! Por si esto no fuera poco para Zahi, ha aceptado además asistir a una boda local, pero como bien sabemos, a él lo que le gusta son las celebraciones de los muertos, ¡no las de los vivos!