Édouard Manet fue un pintor francés, cuya obra inspiró el estilo impresionista, pero que rehusó identificarse con este movimiento. Desarrolló una gran influencia sobre la pintura francesa y sobre el arte moderno.
Manet nació en París el 23 de enero de 1832, hijo de un alto funcionario del gobierno. Para no estudiar derecho, tal y como deseaba su padre, intentó hacer la carrera de marino, aunque no superó las pruebas de ingreso. Después, estudió en París con el pintor académico francés Thomas Couture, y visitó Alemania, los Países Bajos e Italia, para estudiar la pintura de los viejos maestros. La obra de Frans Hals, Diego Velázquez y Francisco de Goya, fueron las principales influencias en su arte.
La fama alcanzada por su trabajo se debió a su forma de retratar la vida cotidiana, a su utilización de amplias y simples áreas de color, y a su técnica de pincelada vívida. Manet empezó pintando temas de género, como mendigos, pícaros, personajes de café y escenas taurinas españolas. Adoptó después una atrevida técnica de pincelada directa en su tratamiento de los temas realistas.
Manet murió en París el 30 de abril de 1883. Dejó, aparte de muchas acuarelas y pasteles, 420 óleos.
Sus obras más célebres son: El desayuno sobre la hierba, El bebedor ausente, Olympia, Almuerzo en el estudio, Madame Manet en un sofá azul, Navegando en velero, Calle Mosnier con banderas, y El bar del Folies Bergere.