En las afueras de York, a menos de 100 kilómetros del muro de Adriano, los arqueólogos han desenterrado más de 30 esqueletos pertenecientes a hombres decapitados. las cabezas estaban todas en lugares extraños: entre las rodillas, en medio del cuerpo o a los pies de los esqueletos. Aún más extraño es que uno de ellos se encontró con anillas de hierro en los tobillos que sólo podrían haber sido puestos cuando todavía estaba vivo. Nunca se había encontrado un entierro de la época romana como éste. ¿Fue una ejecución en masa o es un sangriento ritual funerario? Los expertos dan su opinión sobre qué pudo pasarles a estos romanos.
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