Los volcanes han dado forma a la Europa que conocemos hoy en día, contribuyendo a que exista tierra firme e incluso vida, aunque también tienen una gran capacidad destructora.
En el sur de Italia y en Islandia existen volcanes que son auténticas bombas de relojería. Sus erupciones, inevitables e imparables, provocarán muerte, caos y destrucción. Pero lo más preocupante de todo es que en Europa podría estar despertándose un supervolcán, que amenaza con una erupción de tal calibre que podría borrar del mapa todo el continente.