Roswell evoca el caso ufológico más famoso de la historia de Estados Unidos, atrayendo a los creyentes a una búsqueda interminable de unos supuestos restos guardados en una cámara acorazada secreta del gobierno. ¿Podría tener Canadá el caso real de un OVNI documentado oficialmente? En Nueva Escocia, en la noche del 4 de octubre de 1967, en la remota localidad de Shag Harbour, docenas de testigos, pilotos aéreos, pescadores, adolescentes y agentes de la policía, observaron lo que parecía ser una nave extraterrestre suspendida sobre la superficie del agua. Algunos testigos declararon haber visto y oído al OVNI sumergirse en las aguas frente a la costa. Las autoridades canadienses enviaron a la Marina, la Guardia Costera y a la policía y, tras una completa investigación, declararon que no había ningún indicio de nada sospechoso. Sin embargo, ¿sabe el gobierno canadiense más de lo que está diciendo? Las preguntas siguen en el aire y llevan a dos investigadores del fenómeno OVNI a lanzarse a una investigación y descubrir documentos que dejan claro que el caso nunca debería haberse cerrado.