Por medio del movimiento y la expresión, un profesor enseña a sus alumnos algunos de los elementos que intervienen en la danza: el espacio, el tiempo y la energía. Paralelamente, se presenta la forma en que un grupo de bailarines exploran el movimiento y el espacio como parte del proceso de un montaje coreográfico, con la intención de que el espectador compare y reconozca los elementos comunes y diversos en la experiencia de sensibilización con alumnos y con profesionales de la danza.