En abril de 1945, Hitler era el hombre más buscado de Europa. Los aliados, ya victoriosos querían verlo vivo o muerto. Pero éstos nunca tuvieron la evidencia de su muerte. Pero posteriormente, varios testigos afirmaron la llegada de submarinos nazis a costas argentinas. Aparte, el FBI recibió informaciones que situaban al líder de las SS en Argentina.