Una apasionante, agotadora y peligrosa aventura, atravesando los tres grandes mares de arena (Ergs) del desierto libio. 3.000 kilómetros de ruta llenos de dificultades, en los que se pone a prueba a personas y máquinas, al tener que superar dunas de 150 metros de altura y hasta 70 grados de inclinación.