De Río de Janeiro, en Brasil, a Lima, Perú, el viaje en autobús más largo del mundo dura 100 horas y se extiende a lo largo de 6.300 kilómetros.
En el primer episodio, partimos del Atlántico y llegamos al corazón agrícola de Brasil: Mato Grosso, el estado productor de soja.
La compañía peruana Expreso Ormeño se especializa en trayectos largos. La conexión entre Río de Janeiro y Lima se hizo posible en 2010, al completarse en Perú el último tramo de la carretera interoceánica. Muchos pasajeros son peruanos y bolivianos que trabajan en Brasil. Los billetes de autobús son más económicos que un vuelo. El viaje completo cuesta el equivalente a 200 euros. En su recorrido, el autobús pasa por la Costa Verde, una de las zonas más bellas del país, donde las montañas se encuentran con el Atlántico. Veinticuatro horas más tarde, atraviesa Mato Grosso, estado productor de soja y centro agrícola brasileño. Los campos de cultivo de soja y caña de azúcar dominan el paisaje. Pocos kilómetros al oeste de la carretera comienza un pantanal del tamaño de media Suecia, hogar de 35 millones de caimanes. En esta región se inventó el rodeo, que en los pueblos que bordean la ruta interoceánica se sigue practicando.