Armamento occidental comprado por Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos ha terminado en manos de combatientes en Yemen.
Vulnerando el derecho y los acuerdos internacionales. Así lo revela el reportaje de la red de periodistas independientes “Arab Reporters for Investigative Journalism” (ARIJ). El periodista egipcio Mohamed Aboelgheit siguió durante un año el rastro del armamento empleado en la guerra de Yemen y documentó su origen. El resultado: las armas proceden sobre todo de Alemania, Estados Unidos, Reino Unido, Austria, España, Suiza, Bélgica, Serbia y Bulgaria y llegaron a manos de grupos que, según acuerdos internacionales, no deberían haberlas recibido.
Aboelgheit creo cuentas en redes sociales con identidades yemeníes falsas para introducirse en redes y grupos informales que trafican con armas. En algunos casos, el intermediario insistió en que el fusil era de primera mano y aún no había disparado ni una sola bala.
El reportaje concluye que armas adquiridas por un estado para sus fuerzas armadas son entregadas por intereses políticos a otros grupos. La mayoría de ese material bélico procede de democracias occidentales y está sujeto al denominado “End-User Certificate”, una obligación estipulada en el contrato armamentístico y que impide que las armas acaben en manos de terceros. En Yemen se encuentra también armamento de otras procedencias; de los Balcanes, por ejemplo.
Duración: 26 min.
Año: 2018